27/10/10

Joan Solà, el lingüista irreductible

Los intelectuales de pensamiento crítico e insobornable no abundan. La mediocridad de la condición humana hace débil para con el poder a la mayoría de eminencias y así su voz, ahogada por la indiferencia, pierde fuerza hasta encerrarse en si misma y en su estricto terreno de conocimiento. El lingüista y filólogo Joan Solà (Bell-lloc d'Urgell 1940), que ayer falleció en Barcelona a la edad de 70 años, no era de esos. A su prodigiosa capacidad científica e intelectual sumó una irreductible defensa política y social de la lengua catalana, y puso la combinación al servicio del país y su cultura.

Su actitud cívica le llevó a ser la primera personalidad no miembro del Parlament de Catalunya en intervenir en un pleno para advertir en voz alta a sus señorías y al resto de ciudadanos que el catalán no va bien ni política, ni social ni tan siquiera filológicamente. Quizás por todo ello, el día que, desde las páginas de este periódico, lo apodamos 'El Chomsy catalán', él respondió amable y agradecido, pero discreto (confesó que era la primera vez que entraba en un blog de Internet para escribir un comentario), aseguró que habiamos exagerado. Quienes no han exagerado han sido los expertos, que han situado la obra de Solà junto a la de Pompeu Fabra y Joan Cromines, los auténticos mentores del catalán moderno.
Autor de más de 40 libros sobre sintaxis, historia de la lengua, léxico, prosodia, tipografía, bibliografía y otras materias de lingüística y sociolingüística; Joan Sola ingresó en el Institut d'Estudis Catalans (IEC) en 1999, institución de la que fue vicepresidente hasta su muerte.
Solà fue un apasionado de la docencia. Catedrático de lengua y literatura catalanas en la Universitat de Barcelona (UB) desde 1984, articulista del diario Avui, de cuyos lectores se despidió la semana pasada, entre sus obras, destacan Estudis de sintaxi catalana, de 1972, o la monumental Gramàtica del català contemporani, publicado en 2002, una obra que por profundidad, modernidad y exhaustividad es equiparable a la nueva Gramática del Español Contemporáneo.
Joan Solà, además, codirigió con Jordi Mir la edición de las Obres completes de Pompeu Fabra y editó la obra de Joan Corominas. Doctor Honoris Causa por la Universidad de Lleida, en 2005, recibió la Creu de Sant Jordi de la Generalitat de Catalunya y en 2009 fue galardonado con el 41 Premi d'Honor de les Lletres Catalanes.
Durante su discurso de aceptación del premio, Solà afirmó tajantemente y argumentándolo que: "En Catalunya no hay convivencia lingüística, lo que hay es un pueblo que va hacia atrás en relación a otros". Y como, a pesar de ello, hay estamentos judiciales y políticos que intentan denodadamente que el catalán continúe siendo una lengua de segunda sin futuro en el uso social, las palabras, la obra y la actitud de Joan Solà son, hoy más que nunca, imprescindibles.