16/3/09

JOSÉ Mª CASANOVAS, DIBUJANTE DE 'EL JABATO'


Todos los autores históricos de la editorial Bruguera fueron más que ilustradores, portadistas o guionistas, fueron fabricantes de sueños en un país donde soñar estaba prohibido y inventores de la cultura de masas local cuando por las fronteras no se colaba casi nada de lo que sucedía en el mundo moderno. José Mª Cassanovas Magrí, (Barcelona 1934), dibujante de ‘El Jabato’ y de ‘El Capitán Trueno’ entre otros personajes de la mitología del tebeo hispano, fue uno de ellos. El lunes fue enterrado en el cementerio de Badalona tras fallecer el pasado sábado en el hospital de Mataró.
Casanovas comenzó a dibujar con trabajos como con ‘El pequeño mundo’ (1957) y posteriormente el serial Superfuerte (1958), de editorial Ferma. De ahí pasó a editorial Bruguera, donde fue dibujante de la seria original de ‘El Jabato’ y participó también en algunos episodios de ‘El Capitán Trueno’, antes de incorporarse al equipo de la agencia Creaciones editoriales, el sello que Bruguera creó para la exportación. A través de esta empresa trabajó para las editoriales Ali, Thomson, Fleetway, John Leng, Bastei, i un largo etcétera de sellos de países como EE UU; Finlandia, Reino Unido e Italia. Entre los personajes que salieron de su mesa de dibujo en aquellos años estaban Judge Dreed, Conan the Barbarian o The Phantom.
Siempre para el sello Bruguera, Casanovas participó de la larga lista de extraordinarios creadores (Casamitjana, Castelló Luque, Bertran, Blasco, Ariza, Carrión, Campos, Boix…) que convirtieron la colección Joyas Literarias Juveniles en uno de los hitos culturales de varias generaciones. ‘Las indias negras’ (1970), ‘Un descubrimiento prodigioso’ (1978) y ‘El perro de los Baskerville’ (1982) fueron los títulos de esa serie que firmó, aunque también dibujó algunos títulos de la saga de Pollyanna, otro de los clásicos de las novelas ilustradas para jóvenes que, a partir de los 50 y hasta bien entrados los años 70, fueron uno de los puntales en los que Bruguera se apoyaba para diversificar su producción y enganchar un público que buscaba algo más que los tebeos de toda la vida. Claro que eso sucedía cuando los jóvenes leían, y los clásicos de Julio Verne, por poner un ejemplo, eran una ventana abierta al mundo y sus misterios. Nada que ver con hoy en día, quizás por ello el nombre de José Mª Casanovas Magrí diga más bien poco inculso a los estudiantes de bellas artes.
Desde hace unos años José Mª Casanovas vivía en Premià de Mar, un municipio que parece ser refugio para creadores de tebeos, puesto que Alfonso Font, Usero, Carlos Jiménez y muchos otros dibujantes habitan o han vivido allí. Además, su antiguo compañero y guionista Víctor Mora vive en el municipio vecino de Premià de Dalt. Desde el lunes sus restos reposan en el cementerio de Sant Pere de Badalona, siempre cerca del mar.