JORDI ESTADELLA, 'TITO B. DIAGONAL'

Quizás muchos le recordaran por ‘No te rías que es peor’ o el inefable ‘Un, dos, tres…’, pero para los nacidos en la época de Quico Ledgard y la tele en blanco y negro, Jordi Estadella siempre será el alter ego del pijo prototípico de la parte alta de Barcelona, Tito B. Diagonal. Y eso no era en la tele, ni la UHF ni la VHF de la época estaban para sátiras de ese tipo e inteligencia; eso sucedía en la moderna, joven y descarada Radio Juventud (la voz de Catalunya decía el jingle de promoción), la mejor escuela de radio que ha habido jamás en este país. Y en ella Jordi fue maestro.
Presentador, periodista, actor de doblaje y gastrónomo, Jordi Estadella había nacido en Barcelona en 1948 y falleció ayer en el Hospital Clínic de su ciudad tras una larga enfermedad. Hace apenas un mes recibió la mención de honor otorgada por Radio Associació de Catalunya por su “larga y provechosa trayectoria profesional, llena de imaginación y creatividad que validan su carrera de buen comunicador”. Y nadie mejor para entregarle el galardón instituido por la que fue decana de las siglas de la radiodifusión en catalán que Josep Maria Bachs, otro de sus grandes colegas de los buenos tiempos en RJ.
Además de la radio, Bachs y Estadella coincidieron en TV3 cuando el segundo substituyó al primero en el célebre ‘Filiprim’ (1986). Estadella había debutado en la televisión catalana un año antes, presentando ‘Piano bar’, un espacio creado por Manuel Vázquez Montalbán.
El salto a la popularidad lo dio en TVE con ‘No te rías que es peor’ (1990-91) y el archipopular concurso ‘Un, dos, tres…’, que presentó junto a Miriam Díaz Aroca entre 1991 y 1993. Al programa de Chicho le siguió ‘Esto no es lo que parece’, en La 2 los años 1994 y 1995. En 1997 volvió junto a Ibáñez Serrador para presentar ‘El semáforo’, en dos etapas, en 1995 y en 1997. En 1998 presentó ‘Perdona nuestros pecados’ y en el 2000 el concurso ‘Audacia’. Como actor de doblaje puso la voz, entre otros al célebre y despistado policía francés ‘Inspector Gadget’.
Pero Jordi Estadella será para siempre ‘Tito B. Diagonal’, un personaje clasista y arrogante que, desde su estudio absolutamente exclusivo, provocaba a los progres, ridiculizaba a los modernos, se reía de los rockeros (excepto Roxy Music, quizás) y fustigaba a los catalanistas de la ‘ceba’ irrumpiendo cada madrugada en ‘Al mil por mil’, un programa musical y muy moderno con el que Josep Mª Pallardó (hola pops!) dio a conocer desde RJ2 el mejor rock de los setenta a los jovenzuelos del tiempo. Con una sátira cortante como un cuchillo, aquel pijo del Sándor y su inseparable amigo ‘Tato Ganduixer’ (otro heterónimo) se metieron en el bolsillo a todo el moderneo del tardofranquismo. Años después Tito B.reapareció en el ‘Protagonistas’ de del Olmo y, todavía posteriormente, en un ‘remake’ de ‘Al mil por mil’ en la desaparecida y añorada Radio Club 25 de Terrassa.
Su último trabajo fue presentar y dirigir ‘De boca en boca’, un programa de gastronomía, otra de sus pasiones, en Com Radio.